Ángel Larraz Lalaguna nació en Pardinilla (Alto Gállego) el 3 de octubre de 1905 y murió en el mismo lugar el 22 de diciembre de 1997. Tras realizar sus estudios primarios, pasó su vida trabajando en las faenas agrícolas.
A sus 90 años, gracias a la ayuda y colaboración de sus jóvenes nietos, en especial de Ángel Larraz, decidió relatar de manera autobiográfica sus experiencias vitales. En su narración se refleja la sociedad tradicional de su localidad natal, especialmente en el primer tercio del siglo veinte, de una manera natural, realista y sincera. El relato está escrito mostrando fielmente su lengua aragonesa materna, por lo que el testimonio cobra un doble valor; lingüístico y etnológico.
Se trata, sin duda, de una fotografía auténtica de una manera de vida y de una época que consigue recuperar para legarla a las generaciones actuales.